miércoles, 30 de marzo de 2011

22,36

Las horas pasan lentas, y con el paso del día mi cabeza no hace otra cosa que abandonarse,perder el control. Cuando me doy cuenta de ello,son las tres de la mañana y yo sigo tan despierta como si fueran las doce del medio día.
Las palabras resuenan todavía en mi mente y todavía puedo recorrer cada rincón de tu cuerpo sin pensarmelo dos veces.
Hace algún tiempo hubiese pensado en dejarlo todo y volverme loca, y ahora que solo puedo volverme loca, el dejarlo todo se convierte en pasarme horas y hora mirando cielos con los mismos paisajes.
Y esque hasta que no vuelvo a la realidad,mis pasos parecen no resonar por ningún lado por el que paso.

1 comentario:

  1. Me alegra que vuelvas a escribir. Aunque no cosas tan tristes. Un beso, Kumiko.

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